La deformación posterior al mecanizado en componentes plásticos es un desafío frecuente que se origina en las diferencias fundamentales en el comportamiento de los materiales entre plásticos y metales. A diferencia de los metales, los plásticos tienen menor rigidez, coeficientes de expansión térmica más altos y son viscoelásticos, lo que significa que sus dimensiones son sensibles al esfuerzo, al tiempo y a la temperatura. En Neway, gestionar estos factores es esencial para ofrecer componentes de mecanizado CNC de plásticos dimensionalmente estables. Las principales causas de deformación pueden clasificarse en alivio de tensiones internas, efectos térmicos, selección de material, tensiones inducidas por el mecanizado y geometría/sujeción de la pieza.
Factor | Descripción | Datos Técnicos y Estrategias de Mitigación |
|---|---|---|
Alivio de Tensiones Internas (Residuales) | Los materiales plásticos en forma de láminas o barras, especialmente los moldeados por inyección, contienen orientaciones moleculares congeladas y tensiones internas de su proceso de fabricación. El mecanizado elimina material, alterando el equilibrio de tensiones y haciendo que la pieza se deforme o encoja al buscar un nuevo estado estable. | • Alivio de tensiones previo al mecanizado: Recocer el material a 10-20°C por debajo de su HDT antes del mecanizado. • Selección de Material: Usar acrílico fundido o material extruido con menor tensión inherente que los grados moldeados. • Mecanizado Simétrico: Eliminar material de manera uniforme en ambos lados para equilibrar la liberación de tensiones. |
Efectos Térmicos Durante el Mecanizado | Los plásticos son aislantes térmicos. El calor generado por las herramientas de corte no se disipa eficientemente, lo que conduce a expansiones térmicas localizadas. Al enfriarse, ocurre una contracción no uniforme que resulta en distorsión. | • Geometría de Herramienta: Usar herramientas afiladas, altamente pulidas, con ángulos positivos y canales amplios para una evacuación eficiente de virutas. • Estrategia de Refrigeración: Usar flujo constante de aire comprimido o refrigerante en niebla; evitar refrigerantes líquidos que puedan causar hinchazón en plásticos higroscópicos. • Parámetros de Corte: Altas velocidades de husillo con bajos avances para minimizar la generación de calor por unidad de corte. |
Selección de Material y Comportamiento Higroscópico | No todos los plásticos son igualmente propensos a la deformación. Los polímeros amorfos (como ABS, PC) son generalmente más estables dimensionalmente que los semicristalinos (como Nylon, POM). Además, los materiales higroscópicos absorben humedad del aire, lo que puede provocar hinchamiento. | • Secado del Material: Para polímeros higroscópicos como Nylon (PA) o ABS, secar el material según las especificaciones del fabricante (por ejemplo, 80°C durante más de 4 horas). • Acondicionamiento Posterior al Mecanizado: Permitir que las piezas mecanizadas se estabilicen en el entorno de servicio previsto antes de la inspección final. |
Tensiones Inducidas por el Mecanizado | La fuerza mecánica de la herramienta de corte comprime y corta el material, introduciendo nuevas tensiones localizadas. Una presión de herramienta excesiva, herramientas desafiladas o una sujeción inadecuada pueden “doblar” la pieza durante el mecanizado. | • Sujeción: Usar fijaciones conformes de baja presión o mesas de vacío para distribuir la fuerza de sujeción uniformemente y minimizar la distorsión. • Estrategia de Trayectoria: Emplear técnicas de fresado trocoidal y de avance en concordancia (climb milling) para reducir las fuerzas de corte y el contacto de la herramienta. • Mecanizado en Múltiples Pasadas: Realizar pasadas finales ligeras (≤ 0.5 mm) para minimizar las tensiones residuales del proceso de corte. |
Diseño y Geometría de la Pieza | Paredes delgadas, secciones grandes sin soporte y geometrías asimétricas son inherentemente menos rígidas y más susceptibles a la deformación por cualquiera de las fuerzas anteriores. | • Diseño para Manufacturabilidad (DFM): Mantener espesores de pared uniformes y evitar esquinas internas afiladas. • Prototipado: Usar prototipado CNC para validar la estabilidad de diseños complejos antes de la producción completa. • Procesos Alternativos: Para piezas delgadas y complejas, la impresión 3D puede producir una estructura monolítica más estable. |
Comprender las propiedades únicas de los plásticos mecanizados comunes es esencial para predecir y prevenir la deformación:
• Nylon (PA): Altamente higroscópico y semicristalino. Se hincha significativamente si se mecaniza en estado húmedo y es propenso a deformarse por liberación de tensiones. El secado y el acondicionamiento posterior al mecanizado son imprescindibles. • Acetal (POM / Delrin): Aunque es dimensionalmente estable y con baja absorción de humedad, tiene un alto coeficiente de expansión térmica. Es muy susceptible a la deformación por calor del mecanizado. Es crucial usar herramientas afiladas y una refrigeración efectiva. • Policarbonato (PC): Polímero amorfo con buena estabilidad dimensional pero alta sensibilidad a las muescas. Un mal afilado puede crear microgrietas que actúan como concentradores de esfuerzo, lo que lleva a fluencia o agrietamiento con el tiempo. • ABS: Una opción común para prototipado debido a su buena maquinabilidad. Sin embargo, su baja temperatura de deflexión térmica lo hace vulnerable a la deformación térmica durante operaciones de mecanizado agresivas. • PEEK: Polímero de alto rendimiento con excelente estabilidad inherente y baja higroscopicidad. Sin embargo, su alto punto de fusión significa que si se genera calor excesivo, el material puede ablandarse y recocer, induciendo tensiones significativas.
Si ocurre deformación o se anticipa, pueden emplearse varias técnicas de posprocesamiento. El alivio de tensiones de la pieza terminada mediante un ciclo de recocido controlado puede ayudar a alcanzar un estado estable. Para piezas cosméticas, algunas distorsiones pueden mitigarse durante el servicio de pulido de piezas CNC u otros procesos de acabado, aunque esto es una medida correctiva y no preventiva. La estrategia más eficaz es proactiva, combinando un manejo adecuado del material, parámetros de mecanizado optimizados y sujeciones inteligentes para minimizar la introducción de tensiones desde el principio.